Hoy hemos relizado un experimento muy sencillo.Hemos colocado agua en dos vasos.Después en uno de ellos añadimos dos cucharaditas de sal, para convertirlo en agua salada del mar. Finalmente probamos su sabor y comentamos las sensaciones producidas en el paladar y las diferencias entre el agua dulce y el agua salada. La verdad es que algunos ventolines han puesto caras sorprendentes y casi tod@s hemos llegado a la conclusión de que el agua del mar sabe bastante mal y no es apta para beber.
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