allí tuvimos la oportunidad de montar en poni, ordeñar una vaca de mentiras, dar de comer a los cabritillos y a los patos, sacar agua del pozo, observar las características de ciertos animales, montar en tren...
A pesar del mal pronóstico del tiempo, que afortunadamente no fue tan malo, disfrutamos un montón en plena naturaleza.